Ciudad San Juan de Dios de Las Palmas ha puesto en marcha su Campaña de Cuestación, una jornada en la que un centenar de voluntarios instalan mesas informativas en más de cincuenta puntos de Gran Canaria, así como en Arrecife y Puerto del Rosario, con el objetivo recaudar fondos para la labor social de la institución.
 

Este evento anual, que se celebra desde hace 40 años, pretende hacer un llamamiento a la solidaridad de los canarios para contribuir la puesta en marcha de proyectos que ayuden a las personas desfavorecidas y sus familiares. En concreto, este año irá destinado a sumar recursos para a la financiación de dos pequeñas residencias con 40 plazas y la asistencia de 30 adultos al Centro de Día. En ambos casos, se trata de apoyar a persona con discapacidad gravemente afectadas y a sus familiares.

Además, San Juan de Dios pretende potenciar su actividad en la Atención Temprana fuera del centro. Hace un año, la institución comenzó a gestionar en el municipio de Ingenio (sur de la Isla) este tipo de intervención preventiva dirigida a menores de entre 0 y 6 años con dificultades en su desarrollo o riesgo de padecerlo. San Juan de Dios quiere potenciar estos tratamientos de manera ambulatoria en otras localidades de la Isla.

Por último, la Orden pretende mantener su programa de alimentación básica que actualmente ayuda a 250 familias en riesgo de exclusión. La Campaña de Cuestación de San Juan de Dios es ya una tradición en la Isla que involucra de manera muy activa a los ciudadanos que siempre responden al llamamiento para apoyar la labor que realiza la Orden Hospitalaria en la Isla.

Ciudad San Juan de Dios es un referente de apoyo en Gran Canaria a las personas con discapacidad desde hace décadas cuatro décadas, concretamente desde 1972. Además del servicio que ahora se pone en marcha, cuenta con varias líneas de trabajo: el colegio de Educación Especial, dirigido a alumnos de 3 a 18 años con necesidades educativas especiales, la Residencia Hogar que acoge a menores en el mismo intervalo de edad que presentan gran dependencia o pluridiscapacidad con problemas familiares añadidos. Por otro lado también existe una residencia para adultos con enfermedades de salud mental crónicas y un servicio de rehabilitación para menores y adultos con discapacidad intelectual. Por último, hace un año se puso en marcha un centro de día para atender a mayores de 18 años con pluridiscapacidad con el objetivo de seguir promocionando la inserción de la persona con discapacidad y ayudar a las familias a disponer de tiempo para organización de sus actividades diarias.