Taberno, Ocaña y Lucena homenajean a los Hermanos beatos
Las Parroquias de San José de Taberno, en Almería, Ocaña, en Toledo y Lucena, en Córdoba han celebrado sendas Eucaristías de Acción de Gracias por la reciente beatificación de los Hermanos Feliciano, Honorio y Raimundo, pertenecientes a la comunidad de Málaga.
A los actos religiosos se sumaron algunas autoridades locales y vecinos de esos municipios, que compartieron la alegría de que el Vaticano reconozca los años de dedicación a los más necesitados de los Hermanos asesinados. Más fotos en Flickr
El Hno. Feliciano desarrolló gran parte de su vida religiosa como limosnero en el Hospital san Juan de Dios de la Malvarrorsa en Valencia, donde murió testimoniando su fe en Jesucristo como Hermano de san Juan de Dios.La celebración estuvo presidida por el obispo de la Diócesis Monseñor Adolfo González Montes y concelebrada por un grupo de sacerdotes; en ella participaron Hermanos de las comunidades de Málaga y de Granada Residencia.
En el caso del Hermano Honorio Ballesteros Ramos, en la celebración presidida por el Arcipreste y concelebrada por sacerdotes de la zona participaron un numeroso grupo de familiares y gran cantidad de vecinos de la localidad, representantes municipales del centro de Ciempozuelos y los Hermanos Gabriel García y Enrique y Nicolás. En la misa estuvieron expuestos junto al cuadro del nuevo beato varias recuerdos personales: un reloj de bolsillo que guarda su familia y un crucifijo y trofeo deportivo que el mismo Hno. Honorio regaló a la Patrona de su pueblo.
El domingo 17 tuvo lugar una misa de acción de gracias por la beatificación del Hno. Raimundo García Moreno, en la parroquia Santo Domingo de Guzmán de Lucena a la que pertenecía. La misa estuvo presidida por el hermano Luis Valero, por el párroco y varios sacerdotes de Lucena. Asistieron los hermanos José Cardenas y José Prieto de la comunidad de Málaga y de la comunidad de Córdoba el hermano Manuel Armenteros.
También asisten familiares del nuevo beato. Durante la misa se bendijo un cuadro con la imagen del nuevo beato pintado por Doña María Dolores Lòpez Cibanto.
